FÁBULA DE LOS CUATRO AMIGOS

Érase una vez cuatro amigos llamados Caprichosa, Maravilloso, Prudente y Sensata. 
Estos amigos tenían una magnifica relación entre ellos.Se complementaban,  se comprendían, se lo contaban todo, lo hacían todo juntos. 
Caprichosa era alegre, ocurrente, y cualquier cosa la ilusionaba. Sensata era más seria y juiciosa, a veces un poco gruñona, pero generosa y leal. 
Ella ponía el contrapunto a la vehemencia de Caprichosa. Maravillo como su nombre indica, era sencillamente maravilloso. Alegre, divertido, ocurrente, generoso etc. 
¡Y qué decir de Prudente! pareja de Maravilloso; era formal y educado, muy caballeroso y adoraba a Maravilloso. 
Todos ellos se reunían  alternativamente en sus casas, para celebrar eventos y cumpleaños con comidas y fiestas maravillosas. Eran muy felices y desprendían un halo de de armonía y buen ambiente que todo el mundo percibía. 
Percibían y envidiaban, al punto que, todos querían ser invitados y aceptados en este grupo.

Primero se incorporó Insulso. Este nuevo componente se significaba por su especial forma de tratar a Caprichosa, la distinguía con un trato zalamero en detrimento de los otros tres amigos. Luego se incorporó Apocada, que como su nombre indica, no aportaba nada especial, aun cuando Caprichosa la distinguía con un empeño digno de otras causas. A continuación se incorporó Pavita Real, que tampoco aportó nada digno de mención- Luego llegó Graciosa, Comodín, Forzudo, Urraca, Decrépita etc. Estos amigos eran suficientes para hacer un buen grupo, pero a Caprichosa le parecía que faltaba algo en el grupo ya que le gustaba mucho la bulla el jaleo y dirigirlo todo. Le encantaba que le hicieran la pelota. Adquirió la fea costumbre de invitar a más y más gente sin contar con nadie. Simplemente buscaba a todo el que le caía bien para que se uniera al grupo. Al grito de ¡Fiesta, fiesta! ¡Comer y beber hasta reventar! acudieron personajes de diverso pelaje que pronto hicieron que el ambiente se deteriorara a pasos agigantados. 

Así de día para otro el grupo crecía, y crecía, sin control. Fue entonces cuando Maravilloso y Sensata junto con Prudente, trataron de hacerla ver que aquel grupo ya era incontrolable, y le indicaron de buenas maneras, con cariño, que aquello había que frenarlo. La falsa amiga Caprichosa mostró su verdadera cara traicionando a sus amigos y enfrentándolos con el resto de recién llegados. Aquello fue el comienzo del fin. Al poco tiempo la envidia y la maledicencia se instalaron en el grupo, convirtiéndolo en una secta piramidal donde caprichosa fue investida como líder supremo y la maldad y el rencor acabaron con lo que parecía una amistad inquebrantable.
Moraleja: Los peores amigos son aquellos que te utilizan y fingen quererte mientras que les interesa